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Loco, kamikaze, emprendedor

Todos recordamos la crisis económica como algo todavía presente en nuestras vidas, la economía va mejorando muy lentamente año tras año, pero todos sabemos que, si no fuese por los numerosos emprendedores que han apostado por salir adelante, este país seguiría estancado en la miseria. Locos, kamikazes o emprendedores, no importa como los llamen, pues como dijo Steve Jobs “Los que están suficientemente locos como para cambiar el mundo, son lo que lo hacen”.

Desde el año 2014 hasta la actualidad, la creación de empleo en España ha aumentado en un 1,4%, según los datos del INE, otorgándole el porcentaje más alto a las pequeñas y medianas empresas. La neofobia ha sido superada por más de doscientos mil ciudadanos estos últimos años, pero como pronunció Manuel Antonio Fernández – Marco, cofundador de Mglobal Marketing Razonable S.L “nunca fue tan fácil crear una marca, pero nunca fue tan fácil que una marca resultase irrelevante”.

La publicidad se ha convertido en un elemento indispensable para las nuevas empresas que quieren abrirse un hueco en el mercado, ya que al fin y al cabo, el objetivo de una empresa está en las ventas, y su éxito en cómo las vendas. No somos nadie si no nos conocen, y para ello, precisamos de manos expertas para que nuestros esfuerzos lleguen a ser reconocidos por la sociedad, ya que ellos son los que al final decidirán nuestro futuro.

La comunicación publicitaria, bien realizada, ha sido, es y será indispensable para el desarrollo de nuestra empresa. Todo buen publicista centra sus esfuerzos en llevar a cabo la mejor estrategia comunicativa posible a través de cuatro ejes indispensables: imagen, marca ,identidad y reputación. Al fin y al cabo, una empresa no es más que un conjunto de personas, unidas todas ellas con el fin de generar bienes y servicios a una comunidad, si los trabajadores no están contentos, difícilmente se podrá generar una marca lo suficientemente fuerte como para posicionarse en el mercado. Seguidamente, no podemos olvidarnos de cuidar nuestra reputación, es decir, la opinión que nuestros clientes tienen de nosotros mismos, pues como dijo el gran publicista Phillip Kotler “la mejor publicidad es la que hacen los clientes satisfechos”, solo aumentando el número de clientes satisfechos nuestra imagen mejorará. 

Loco, kamikaze o emprendedor, no importa como los llamen. Creer en lo que se hace y hacerlo de la mano de profesionales nos conducirá a alcanzar la clave del éxito.

Patricia Sendra.